Una cúpula celeste .
Casi al lado de la Gran Vía, y de camino a una de las zonas de Madrid más degradada, pero donde se encuentran algunas de las joyas que oculta esta villa, nos encontramos con la iglesia de la Buena Dicha.
La propia portada no deja indiferente al que la contempla, aunque donde se sitúa, la calle Silva, no ayuda mucho a pararse a observarla con detenimiento.
Esta iglesia empezó a levantarse en 1916, es obra de Francisco García Nava, y tanto en el exterior como en el interior podemos encontrar multitud de estilos reflejados.
Una de las cosas que más llama la atención del interior de esta iglesia es su cúpula, de color celeste, ¿entráis a verla?.